jueves, 16 de mayo de 2013

Una misma noche


Leopoldo Brizuela
Una misma noche
Alfaguara, 2012, 276 páginas.

"Y es que Borges ha ido a comer con Videla. Y dice que Pinochet es, sin duda, un caballero. Y hace un culto de sus ancestros militares. Y a la vez es el único que me abre la posibilidad de un destino, que no sea ser padre, ni médico de policía, ni policía, ni muerto", reflexiona Leo Bazán, protagonista de Una misma noche, ante el laberinto político que le tocó vivir. Leo cuida de su anciana madre, da clases a jóvenes con intereses literarios y se ocupa en la elaboración de una novela. El robo a la casa de unos vecinos le gatilla el recuerdo de la violencia que ha tratado de olvidar. En 1976, durante la dictadura militar argentina, un grupo de paramilitares irrumpió en su hogar. Mientras hacían las preguntas de rigor, Leo se dedicó a tocar su piano.

¿Por qué reaccionó de este modo? ¿Quiso complacer a los paramilitares o demostrar que no era un simple “negrito”? A partir de estas preguntas la escritura para Leo sirve a modo de conexión entre el pasado y el presente, pero “no como quien informa, sino como quien descubre”. Así, las revelaciones se sucederán unas tras otras, en una suerte de policial sentimental, en donde no importa tanto el encontrar a los culpables como el reconstruir los trozos esparcidos de una identidad que se ha gestado en medio del horror. En su búsqueda, Leo saltará de la ficción a la historia y, por último, al sueño, pues, como apunta uno de los personajes, “quizá no haya verdad que la imaginación no intuya”.

Abandonadas las perspectivas maniqueas, Leo (y el lector) siente que las dudas lo señalan desde el espejo. “¿Solo acusamos para no ver que el mal que habita en el otro también acecha en uno?”.

Aunque a ratos resbala en el melodrama, Una misma noche es recomendable por su prosa transparente, la tensión a la que somete al lector y su reivindicación de la esencia intocable de lo humano: la dignidad. 

Julio Meza Díaz

(Publicado originalmente en la revista literaria el Buen Salvaje Nro. 1).

No hay comentarios:

Publicar un comentario